No podía sospechar en mi última entrada lo que me aguardaba a la vuelta de la esquina.
Aún no sé si ha sido para bien o para mal, pero quiero creer en lo de que no hay mal que por bien no venga y caer a lo más hondo del pozo solo tiene un camino posible: hacia arriba.
Releyendo mi anterior entrada, noto que vislumbraba una pequeña esperanza de que mi parcialmente roto tendón de aquiles podría ir regenerando poquito a poco con el tiempo. Iluso de mí, bastó un pequeño traspies en casa para que el gemelo tirara de la pequeña inserción que quedaba hasta el talón y la rotura se convirtiera en total, y además crónica, peor pronóstico imposible.
Mis conversaciones con los traumatólogos no tienen desperdicio, no se creían que pudiera llevar dos meses con el tendón roto, pequeñas broncas por aquí, comprensión de mi situación por allá, me querían ingresar en el hospital y tuve que pedir el alta voluntaria para intentar arreglar mis asuntos profesionales ante una posible larga baja, no había más remedio.
Al día siguiente valoraciones de la rotura y el tratamiento quirúrgico ya que al ser una rotura crónica no conocían el estado y el desplazamiento de los bordes del tendón, así que resonancia de urgencia, afortunadamente, se apreciaba que el trozo de tendón que quedó había mantenido la irrigación y la distancia y en principio se podía abordar con tratamiento quirúrgico simple.
A continuación he decidido explicar en algunas entradas el proceso de recuperación, por si a alguien con la misma lesión en un futuro le pudiera servir, de aquí el subtitulo de la entrada. Así que si no queréis leer detalles os emplazo a saltaros esta parte.
Me operaron el día 23 de diciembre con anestesia raquídea, la técnica fue la de anastomosis termino-terminal ( es decir, sutura directa de los bordes del tendón), pero al ser crónica, el cirujano aplicó un refuerzo del aquiles con el tendón delgado plantar (otro tendón de la zona que tiene importancia menor). Para los más curiosos y poco aprensivos, pinchar aquí si queréis ver la técnica en una intervención real.
Al parecer todo salió bien, salvo las primeras horas en las que al ir desapareciendo los efectos de la anestesia el dolor fue grande y tuvieron que ponerme una bomba de analgesia intravenosa, el dolor es ligero los primeros días y después simplemente se convirtió en molestia en la zona de la cicatriz. Me pusieron escayola de la pierna completa con posición en equino (con el pie estirado) para favorecer la cicatrización del tendón durante tres semanas, me dieron el alta en menos de 24 horas, pie en alto, pinchazo diario de heparina para prevenir trombosis y rezar para que la herida no se infecte fue mi particular modo de despedir el año viejo y recibir el presente. Que diferencia con otros años en los que el día 1 tenía la tradición de salir a correr por los montes de las Hurdes.
Recien operado |
Lo peor de este periodo de tiempo es la incapacidad y la dependencia para prácticamente todo, la escayola pesaba como una losa adosada a la pierna y necesitaba ayuda para todo, menos mal que tengo la mejor mujer del mundo. Manejarse con las muletas es complicado al principio, aunque se va cogiendo fuerza y destreza en poco tiempo . Los días se me hacían eternos a pesar de mi empeño por actualizar mis necesidades y aficiones informáticas, lectoras, de tv-series y seguir en contacto con el compañero que atendía mi ausencia, es lo que tiene la experiencia de mi primera baja laboral en 25 años.
Pasaron las tres semanas y volví a consulta. La zona estaba tumefacta e inflamada, pero afortunadamente la herida tenía un aspecto estupendo, el traumatólogo me recomendó comprar una bota especial llamada cam-walker que es como una bota de esquí rígida con una rótula que fija los grados de inclinación del pie, en principio 2 semanas con 35º e ir reduciendo esa inclinación paulatinamente para que el tendón vaya tensionandose muy poco a poco, todavía sin apoyo. Además me recomendaron que realizara movilidad simple del tobillo sin forzar dos o tres veces al día. Yo no tuve que comprar la bota ya que me la dejó un compañero de infortunio pasado, pero si a alquien le interesa viene a costar entre 150 y 400 euros según el modelo.
Herida a las tres semanas |
Cam Walker |
La semana pasada bajé la graduación de la cam-walker a 15º y empecé a apoyar poco a poco, todavía con muletas, la movilidad es mayor y la inflamación ha bajado, me realizo automasajes suaves en la zona y me quité los puntos ya que la siguiente cita me la dieron para tres semanas después y la herida está cicatrizada.
Actualmente la única molestia que tengo es a nivel de la cicatriz, ya que noto zonas con adherencias que me tiran un poco, así que estoy tratando de masajearla para despegarla sin forzar en ningun momento el tendón ( es muy recomendable y si alguien no se atreve esto también lo puede realizar un fisioterapeuta).
La semana que viene me bajan a 0º la bota y tocará empezar la rehabilitación tras seis semanas desde la operación, ya os iré contando, tengo buenas sensaciones y aunque mis piernas todavía no, mi imaginación empieza a correr.
Pd:. Me olvidaba decir que ya estoy trabajando, he leído que la media de una baja laboral por rotura del tendón de aquiles es de cuatro meses, yo me he tenido que conformar con cuatro semanas, ya sabéis, cosas de autónomos.