Mis tiradas largas ya no son a ritmo, me voy a la Sierra y durante un par de horas voy trotando por los caminos, caminando campo a través, escalando unos peñascos, me tumbo en la hierba a estirar, esprinto una cuesta arriba, me siento a comer algo, una bajada técnica por piedras......
El otro día, mientras trotaba por los caminos de la Sierrilla tratando de recuperar tras la Maratón de Badajoz, me vino a la memoria un video de Kilian Jornet que había visto tiempo atrás, en él comenta que tras sus primeras ultras, tardaba tres semanas en recuperarse, pero que ahora en un par de días tras darse una paliza en alguna 100 millas, puede estar otra vez entrenando. Y es que el cuerpo no solamente aprende con el tiempo a correr más y más rápido, también aprende a recuperarse antes.
A parte de esta capacidad de recuperación física, creo que es muy importante la capacidad de recuperación mental, lo estoy experimentando en estos meses de reto. He comprobado como mente y cuerpo van de la mano. Si alguien se marca un objetivo y se dedica en cuerpo y alma a él, una vez que lo consigue su cuerpo reacciona y posteriormente se desploma buscando el descanso y la recuperación incluso a nivel orgánico, además el sistema inmunológico marca un reset y se queda unos días bajo mínimos, por eso resulta tan frecuente que algunos virus nos invadan en esos días.
En mi caso, como el objetivo es múltiple, he notado como no se produce ese desplome tras las maratones, obviamente acabo cansado, pero mentalmente al día siguiente estoy ya mirando el siguiente escalón y no sé si sera efecto mental, pero no me cuesta tanto ponerme a entrenar nuevamente y además no he tenido ni un mísero catarro en todo el invierno. Creo que por eso es posible, como hacen algunos corredores, plantarse en la salida de una prueba ultra tras otra, un iron man e incluso plantearse retos increíbles, lo primero es que tu mente lo asimile y lo apruebe, después, con los entrenos el cuerpo sin duda se adaptará.
Creo que cualquiera que tenga un plan de entrenamiento lo habrá probado en su piel, si un día tenéis programado por ejemplo una tirada de 20 kms. a ritmo M, la mente va asimilando esa información desde horas antes del entreno, después el cuerpo se adapta y normalmente se acaba bien. Otro día tenéis un cochinero de 14 kms., la mente asimila, el cuerpo se adapta y se hace el entreno, pero si cuando vas por el km. 10, te dicen que tienes que hacer 20, el cuerpo, a pesar de tener la capacidad, no reacciona tan rápido y seguro que no acabamos con las mismas sensaciones que el día de la tirada larga, la mente no ha tenido tiempo de asimilar el cambio. Por eso cuando uno se decide al final de un entreno hacer "One more", se acaba con esa sensación eufórica de haber superado una dura prueba y sin embargo es simplemente un kilómetro o una serie más.
No sé si estaréis de acuerdo pero yo lo estoy comprobando, mi mente no fijó el objetivo para el 19 de Febrero en Sevilla, ni para el 18 de Marzo en Badajoz, ni para el 15 de Abril en Cáceres, sino que está fijado para el 22 de Abril en Madrid, y mi cuerpo se está adaptando perfectamente para llegar con buena forma hasta el final.....otra cosa es que los tendones no entienden de esto y tendré que cuidar un poco más este mes mi rodilla y mi gemelo derecho.