Cierto es que en una Maratón de montaña no se siente esa presión añadida del ansiado y asfixiante crono, pero esta es una Maratón muy corrible, y por eso mismo resultará muy dura, con 43 kilómetros y "solo" 3.300 mts. de desnivel acumulado.
Estoy contento con los entrenos, donde ha prevalecido siempre tirar de fuerza y técnica, trabajar tanto las subidas como las bajadas con ritmos fuertes y hacer fartleks en llano, sin series ni cochineros y dejando siempre algún día a la semana para la mountain bike. Semanas de entre 50 y 70 kilómetros y tiradas por la Sierra de entre 20 y 30 kilómetros deberían ser suficientes para hacer una buena carrera, luego ya sabemos que la Maratón, el tiempo que haga y, sobre todo, la estrategia adoptada nos pondrán a cada uno en su sitio.
Este es el perfil, valorando que conozco el terreno, voy a plantearme comenzar regulando y no regalar ningún esfuerzo extra antes de llegar al pico de la Silleta, en el km. 13, después si las fuerzas acompañan, espero poder mantener un ritmo sostenido hasta el km. 32 por terreno continuo de toboganes y con tres subidas muy duras. Lo ideal sería llegar con fuerza a los 10 últimos kilómetros ya que son los más favorables y donde se puede vaciar el cargador, a no ser que ya haya gastado antes todas las balas. Mi objetivo, como siempre por este orden, terminar entero, sufrir lo suficiente como para disfrutarlo después, bajar de 4h45' y luchar el podium de mi categoría.