En una carrera de Montaña descender arriesgando para ganar tiempo es como tener que elegir susto o muerte.
Tengo que reconocer que cuando era más joven buscaba asiduamente mi encuentro periódico con la secreción de adrenalina, aún sin caer en la exageración, experiencias con esos locos amigos que todos tenemos a los 18 y que ahora se me antojan casi suicidas me han dejado milagrosamente vacunado contra los espantos, locuras en moto, en coche, ala delta a salto de mata, barrancos sin formación, escalada sin seguridad.....Cuando en una salida a la que no asistí, un amigo se quedó para siempre en el fondo del río Jerte con su piragua y otro de mis mejores amigos casi lo hace por intentar sacarlo comprendí la suerte que habíamos tenido hasta entonces y mi necesidad de "emociones" cesó, nunca sabré si afortunada o desgraciadamente se acabaron las aventuras locas.
Han pasado muchos años y nunca volví a arriesgar tanto, a decir verdad casi no volví a arriesgar nada. Primero me sedujo el baloncesto y después coincidiendo con mi desarrollo profesional la inactividad más absoluta, hasta que hace cuatro años apareció de la forma más fortuita posible la posibilidad de correr, correr por correr y correr como los que pasáis por aquí entendéis lo que quiero decir con correr, con necesidad, con sufrimiento y goce, con pasión.
Y pasado un tiempo me dio por probar también la Montaña, y busqué los cerros, las peñas y las alturas, y como todo lo que se sube hay que bajarlo después, en los descensos me volví a encontrar con una antigua amiga, la adrenalina. Bajar rápido volvió a despertar sentimientos dormidos, y he tenido sustos, esguinces repetidos secuelas de mi paso por el baloncesto y caídas, muchas caídas, pero me encanta, arriesgo, por eso bajo bien, hay que aprovechar la inercia de caída con el cuerpo, buscar el equilibrio con los brazos y mover los pies rápido, casi como un baile, con el tiempo llegas a poder anticipar tus apoyos tres o cuatro pasos antes de hacerlos, aunque ya me gustaría echarle el valor de Kilian.
Después de un par de semanas de entreno de Montaña, he estado unos días en la playa y he podido comprobar que volvía a estar bien, recuperando la forma con un rodaje de 19 kms. a 4:42 min/km por el parque de Doñana que me supo a gloria.
Ayer, ya en casa, volvía a sentirlo, un par de bajadas vertiginosas por la Sierrilla disfrutando a tope a menos de 4 minutos y justamente al acabar, cuando ya el camino llanea, me he vuelto a hacer un esguince, esta vez en el tobillo derecho, creo que siempre me ocurre cuando bajo el nivel de concentración que llevo en la bajada difícil, ahí el terreno es peor, pero mi mente está concentrada y anticipo los pasos, no hay sorpresas, sin embargo cuando te relajas, cualquier piedrecilla te tumba. No ha sido fuerte, por el nivel de la inflamación y dolor que tengo, creo que podré correr el domingo sin problemas ya sea vendado, aunque seguro que no podré bajar esas pendientes que hay como hubiera querido.
Pd:. Entrada dedicada a mi amigo Vicente, que en paz descanse.
Bonita entrada dedicada a un amigo.
ResponderEliminarSe te suelto en la montaña, por eso decía la canción eso de ...¡¡Y el dice que es feliz en la montaña, que hace mucho tiempo que no sale, que le pasará al pobre MIgue que hace mucho tiempo que no sale, lalalalalala!! jejeje.
A ver si cuando bajes a la playa te animas un año por la Costa de la Luz ( zona de Cádiz ).
salu2 desde matraquilandia.
Bueno Miguel es verdad que ya no estamos para ir "a lo loco", o al menos tan a lo loco, además no somos nosotros mismos sino que somos más: mujer, hijos... pero bueno, buscar emociones fuertes es lo mejor. Pueden serlo sin necesidad de arriesgar la vida, cruzar la meta de cualquier carrera, en especial de una maratón, es como meterse un buen buco... Es verdad.
ResponderEliminarSaludos y menudo pasote lo de Doñana.
Fuerza!
Es como los ciclistas, los que bajan e forma valiente son los que ganan. ¿pero a nuestra edad ponernos a bajar en plan cabra? Mi hermano lleva dos esguinces seguidos en diferentes pies por eso mismo este verano. Te leo, leo la entrada de Isidro y me acojono, yo que soy un tipo tranquilo y cerebral. Mis recuerdos de bajar a todo trapo en la montaña es llegar abajo con los pies machacados y no poder seguir a ritmo decente a partir de ahí.
ResponderEliminarCuidate ese esguince compañero, llevas razón en lo que dices, a la minima que te despistas y pierdes la concentracion vienen los sustos, muy chulo el video de killian
ResponderEliminarVaya, espero que no sea nada lo de ese esguince, como dices al ver pasar el peligro nos relajamos y es cuando nos llevamos los sustos. Adoro la montaña, pero sé que es muy grande y yo muy pequeña, así que siempre prefiero pecar de prudente.
ResponderEliminarCuidate.Ves con cuidado,que ya no somos unos crios.jajjajaj
ResponderEliminarYa siento lo de tu amigo, aunque fuera hace tiempo.
ResponderEliminarCuídate ese esguince. A mi me pasa parecido, he tenido muchos esguinces y ninguno en la montaña, la mayoría por ir despistado y pisar mal bordillos :(
Lo importante es que te recuperes bien de ese esguince y te permita realizar la carrera.Menuda vidilla de aventurero.....ufff,con lo tranquilito que he sido yo....Espero tener una buena subida y mejor bajada..soy novato del todo y no se como me irá..conservaremos todo lo que podamos.Cuidate, un saludo
ResponderEliminarpues yo de ni de asomo bajo como hace 10 años... Me he vuelto un miedica... Cuidaté ese esguince, aunque con la experiencia que tienes con ellos seguro que no te impide llegar al domingo. Tu amigo se sentirá orgulloso de ti. un abrazo
ResponderEliminarCuídate y mucha concentración en la próxima.
ResponderEliminarESPERO QUE NO SEA NADA AMIGO MIGUEL.. YO TAMBIÉN SOY DE LOS QUE BAJAN FUERTE... SI SI COMO ME OYES BAJANDO NO ME SUELEN ADELANTAR NUNCA.
ResponderEliminarAlgo tiene que tener la montaña cuando se vuelve a correr apesar de saber que es peligrosa en las bajadas, ánimo compi, que la recuperación sea rápida un saludo.
ResponderEliminaren mi caso, peco claramente de prudente en las bajadas, y aun así me caigo de lo lindo... tendre que entrenarlo algo
ResponderEliminarCuidado, porque a pesar de compartir aficion a la emiciones fuertes nosotros no somos pro , y cualquier lexion seria te deja jodido , de baja y buscando quien te pueda arreglar la averia.
ResponderEliminarDisfruta pero con coco.
Tienes toda la razon Miguel, un descuido en esos terrenos de Dios y va todo al traste, esperemos que sanes pronto, es bonito, recordar a los amigos.
ResponderEliminarUn abrazo hermano.
Tú lo has dicho, ya tenemos una edad y unos objetivos lo suficientemente sólidos como para no hacer el bruto bajando... Pero es que a veces sólo bajando y sin hacer el bruto uno se puede llevar un buen susto...
ResponderEliminarLa montaña para preparar maratones hay que subirla bien y bajarla sin arriesgar NADA. Pero si quieres competir en montaña, tendrás que bajar rápido o perderás lo ganado en la subida. Por eso me quedo con la opción 1... :)
Me encantaría tener los huevos suficientes para poder bajar a tumba abierta pero mi limitada técnica (y que me acojono) no me lo permite. Disfruta de la carrera Miguel y no hagas el loco en las bajadas. Suerte
ResponderEliminarBAJAR A TUMBA ABIERTA ES DE LO MEJOR QUE HAY
ResponderEliminarPara mi es lo mejor que tiene la montaña, el poder bajar como una cabra lo que he subido como un lento tractor. Suelo tomármelo como un rápidísimo ejercicio mental con el que tengo que encontrar el sitio exacto donde ir poniendo los pies. Supongo que empezar en la montaña haciendo canicross, osea tirando de mí una "bestia parda" cuesta abajo, hizo que me espabilara y le cogiera el gusto.
ResponderEliminarSe te ve muy bien con esos ritmos, Miguel. Cuidate el esguince y a ver que tal el domingo.
Un saludo
Bonita entrada, Miguel y si, yo tambien pienso a veces que con esto del correr estamos viviendo una segunda juventud, volviendo a vivir sensaciones olvidadas.
ResponderEliminarDisfruta esos momentos, que valen la pena. Y suerte para el domingo.
Saludos
Saludos. Yo en las bajadas soy muy prudente, carezco de técnica y eso me puede provocar algo serio. Ten cuidado y controla mucho.
ResponderEliminarSaludos.
Bueno, correr asumiendo riesgos, es lo que tiene. Pero si no lo hubieras probado, no habrías podido contar esta crónica como la has contado. Y por lo menos, ahora has ganado la experiencia y quizás en otra ocasión, actues de otra forma.
ResponderEliminarAnimo, y que te mejores.
saludos!
Yo soy bastante malo bajando aunque en las últimas carreras he mejorado bastante. Eso sí, tomo riesgos muy calculados no bajo a lo loco.
ResponderEliminar19km a 4:42/km, es curioso como ha cambiado en un par de años nuestra definición de un "rodaje"
Hay que tener cuidado con las bajadas. Yo tengo los tobillos bastante tocados y cada vez que bajo más rápido de lo "normal" noto como van sufriendo en cada movimiento que hago y de ahí al esguince no hay nada. Ánimo en la recuperación...
ResponderEliminarSiempre hay que pagar un precio por las cosas, y en nuestro caso son los tobillos. Pero estoy contigo que la sensación es buenísima, cuando vas concentrado al 100% y sientes que vas volando cuesta abajo.
ResponderEliminarEspero que ese tobillo se recupere pronto y que vuelvas a bajar disfrutando a tope.
Saludos
Entiendo perfectamente lo que dices porque también me atrae eso de bajar "disfrutando", pero es cierto que a veces hay que medir esos riesgos para no pasarse. Me quedo con la técnica de los brazos y los pasos pequeños, pero yo le añadiría ir dando saltos cortos. Los largos con un 45 de pie hemos de tener cuidado en los apoyos y e sobre todo en los tropiezos.
ResponderEliminarA seguir disfrutando pero con cuidado, Miguel.