Corriendo en Ramadán

Nos empeñamos en poner cada vez más trabas a la aparente sencillez que nos ofrece la vida.

Ayer se celebró en Guipúzcoa la Zumaia Flysch Trail, una dura carrera de Montaña de más de 31 kilómetros perteneciente a la Copa de España. Me interesó porque competía el mejor corredor de montaña que tenemos por estas tierras extremeñas, y aunque estuvo peleando toda la carrera en cabeza, al final se tuvo que conformar con la cuarta plaza, grandísima carrera Pedro, las fotos de la llegada muestran la dureza de la prueba.  

Zaid y Pedro, en cabeza

Además de esto, el que verdaderamente me llamó más la atención fue el ganador, Zaid Aid, de la selección andaluza. Zaid es un atleta musulmán practicante, yo no soy nada religioso y no tengo ningún prejuicio con nadie de ninguna religíón, lo que me llama la atención es que desde el pasado 20 de Julio estamos en el mes de Ramadán para los musulmanes, y es bien conocido que durante este mes, además de otras cosas (fumar, mantener relaciones sexuales), ningún practicante de la religión islámica puede comer y/o beber nada desde el amanecer hasta la puesta de sol. He leído que Zaid de levantó el día de la carrera a las 6 de la mañana, comió fruta y bebió agua mientras aún era de noche y después se fue a correr, por supuesto no  utilizó ningún avituallamiento durante ni posteriormente a la carrera, y lo que a mí me parece ya el colmo del suplicio, no pudo tomar ni un sorbo de agua hasta que el sol se ocultó tras el horizonte, sobre las 9 de la tarde.

Esta anécdota me ha hecho darme cuenta que en cuatro días comienzan los Juegos Olímpicos de Londres, en pleno mes de Ramadán, donde sin duda competirán cientos de atletas musulmanes en todos los deportes, y muchos de ellos llevarán el handicap del ayuno que según la disciplina que sea puede llegar a ser un grandísimo impedimento para rendir lo que se espera en un acontecimiento como este, sobre todo en carreras de fondo a pie, remo, ciclismo, triatlón. ¿ Os imaginais competir a ese nivel sin probar una gota de agua en todo el día?.

Como solución excepcional y temporal, los Ulemas, los sabios que interpretan la sharia (ley islámica) de algunos países oficialmente musulmanes como Marruecos, Egipto, Jordania o Arabia Saudí, aduciendo que los atletas son viajeros que trabajarán duro por el bien de su país, han dispensado a sus deportistas del cumplimiento del Ramadán durante los Juegos, aunque siempre de forma voluntaria y cumpliendo posteriormente los días que se salten. Espero que además de los maratonianos marroquíes,  lo hagan también Mo Farah y Ayad Landasem para que podamos ver un 10.000 en condiciones.