Estrategia de carrera

Para triunfar en una batalla son primordiales la motivación, la preparación, la actitud y, sobre todo, una buena estrategia. 

Aquí me encuentro delante del plano, el perfil y la infografía de la Maratón de Montaña del domingo, trantando de emular las dotes estrategas de Anibal, Julio Cesar o Napoleón al frente de sus tropas. Me temo que en cuestiones militares no daría la talla, pero conociendo cada vez mejor mis humildes aptitudes físicas, creo que puedo valerme para establecer una buena estrategia de carrera.

Mi objetivo fundamental en esta carrera es acabar satisfecho con el planteamiento realizado, ya sabeis que en montaña el tiempo es siempre muy relativo. Ya corrí esta prueba el año pasado, pero han variado el recorrido, cambiando los primeros diez kilómetros llanos por 500 mts. más de desnivel y alargándola hasta casi los 43 kms., haciéndola por tanto bastante más dura. Sin embargo observo que los últimos 13 kilómetros son los mismos, bastante llanos de perfil, así que he decidido que mi estrategia principal se basará en disfrutar del terreno técnico para llegar a esos kilómetros con fuerza para correrlos, y si puede ser con buen ritmo mejor. De salir todo bien, supongo que podría acabar por debajo de las 5 horas y en torno a la mitad de la clasificación, ya que en estas carreras pequeñas el nivel suele ser bastante notable.

Este es mi plan estratégico para el domingo, creo que no olvido nada, he establecido tramos en función al desnivel, al tipo de terreno y los kilómetros acumulados y también he perfilado mi estrategia alimentaria en función de los avituallamientos.

Ayer hice mi ultimo rodaje suave y ahora mi única preocupación radica en el tiempo que pueda salir el domingo, aunque las previsiones no son malas, y que me he levantado esta mañana con ligero dolor de garganta, que espero que se quede simplemente en eso.